Reeligen a Ursula von der Leyen presidenta de la Comisión Europea

Con votos a favor de 401 de los 720 eurodiputados, la alemana Ursula Gertrud von der Leyen recibió la confianza del Parlamento Europeo para repetir por cinco años más como presidenta de la Comisión Europea, es decir, hasta 2029.

La exministra del gobierno en Alemania de Angela Merkel consiguió 41 votos más de los necesarios para conseguir la mayoría, con la cual podía ser nombrada la presidenta del equivalente al poder ejecutivo en la Unión Europea.

Votaron a favor de ella los bloques de partidos de centro, centro-izquierda y otros de corte ‘progresista’, como el Partido Popular Europeo (PPE) al cual pertenece ella, así como los socialdemócratas, los liberales y los verdes.

Votaron en contra tanto los diputados más a la izquierda (Patriotas por Europa, La Izquierda y Europa de Naciones Soberanas) así como los más a la derecha, (Conservadores y Reformistas).

La derecha tuvo un ascenso importante en las últimas elecciones de la Unión Europea, especialmente protagonizado por el crecimiento de los Hermanos de Italia de la primera ministra en aquel país, Giorgia Meloni, pero insuficiente para poder imponer un nuevo rumbo con una persona distinta en la Comisión Europea.

Aunque Von der Leyen pertenece al partido Unión Demócrata Cristiana (CDU, por sus siglas en alemán, que está afiliado al PPE a nivel europeo) su nombre podría parecer engañoso, pues se ha caracterizado por una ideología de corte progresista, en ocasiones inclinada a temas más parecidos a la agenda de los socialdemócratas y otras corrientes izquierdistas.

Vox de España de Santiago Abascal, Hermanos de Italia de Giorgia Meloni y otros partidos de la derecha, sobre todo del centro y este de Europa, manifestaron su rechazo a Von der Leyen por ser la cabeza de la Unión Europea mientras afronta distintos retos, especialmente el problema de la inmigración ilegal.

Viralizaron particularmente en Twitter (X) el acalorado discurso de la eurodiputada polaca Ewa Zajaczkowska-Hernik, quien criticó el Plan de Acción Migratoria y el Green Deal (pacto verde, de restricciones al campo en favor de una agenda ecologista) impulsados por Von der Leyen, y hasta aseveró que “debería de ir a prisión” por la violencia relacionada al flujo migratorio irregular.

La ahora reelecta presidenta de la Comisión Europea sostuvo la importancia de continuar con las acciones para frenar a Rusia en la guerra sobre Ucrania y en buscar la estabilidad en los difíciles momentos que requiere el bloque de países del viejo continente.