La diputada Brenda Ríos se dejó ver este lunes en la Ciudad de México, donde hizo una parada estratégica en la oficina de Ariadna Montiel, la secretaria del Bienestar y figura clave de la 4T en Chihuahua. 

La foto que compartió la legisladora local vino acompañada de un mensaje sobre largas y productivas pláticas, aunque el contenido de esas conversaciones quedó en el aire.

No es ningún secreto que Ríos ha estado en un enfrentamiento directo con el panismo de la capital, y no es difícil imaginar que ese fue uno de los temas principales que discutió con Montiel, quien, más allá de su rol en el gabinete, tiene en sus manos la estrategia política para que Morena pinte de guinda Chihuahua en 2027. 

Lo que se acuerde en esos despachos será sin duda palomeado por la presidenta Claudia Sheinbaum, quien también tiene sus ojos puestos en el estado grande. 

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Claudia Sheinbaum dio su primer golpe en el tablero de inversiones para Chihuahua, anunciando 120 millones de pesos destinados a la apertura de centros Liconsa. 

Este movimiento no es solo económico, es claramente un guiño político a la región centro-sur del estado, donde la 4T ha batallado para ganar terreno.

Con 14 centros de acopio de leche que se instalarán en puntos estratégicos –cuatro en Chihuahua capital, tres en Delicias, dos en Saucillo y uno en Camargo–, Sheinbaum busca conectar con los productores lecheros, un sector que ha resentido los embates de la economía en años recientes. 

Cuauhtémoc también tendrá un papel clave en la pasteurización, lo que fortalecerá la red de distribución de Liconsa.

Este plan, además de darle un respiro a los lecheros, es un guiño hacia las Tiendas del Bienestar, un proyecto que recuerda a la vieja Conasupo, y que puede tener implicaciones electorales clave en una región donde Morena aún tiene trabajo por hacer.