Posverdad

El alcalde Cruz Pérez Cuéllar lanzó un mensaje a Gilberto Loya  al abordar el tema del supuesto cártel Tren de Aragua, insistiendo en que la autoridad debe combatir al crimen sin distinciones ni espectáculos mediáticos. 

En un tono de llamado a la mesura, cuestionó la estrategia de ventilar públicamente la posible existencia de este grupo, postura que contrasta con las declaraciones recientes del Secretario de Seguridad Pública Estatal, Gilberto Loya.

Pérez Cuéllar enfatizó que no se debe hacer publicidad a los grupos criminales, pues priorizar el nombre o la afiliación de los detenidos distrae de lo realmente importante: aplicar la ley sin parcialidades. 

La diferencia de narrativas entre el ámbito estatal y municipal pone de manifiesto una falta de coordinación preocupante en la estrategia de seguridad. Mientras el estado destapa la existencia de nuevas amenazas, el municipio pide enfoque en acciones concretas en lugar de declaraciones.

Lo cierto es que en temas de seguridad la ciudadanía necesita resultados tangibles.

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La decisión de Salvador Caballero desde Gobernación Estatal de extender una hora el horario de bares y centros nocturnos por la temporada invernal deja un sabor agridulce. Por un lado, es evidente que beneficia económicamente a estos negocios, que a menudo representan una fuente importante de empleo e ingresos. Sin embargo, el impacto social y de seguridad que puede acarrear no debe ser subestimado. 

Chihuahua, uno de los estados con mayores índices de accidentes y muertes viales, podría enfrentar un incremento en estas cifras por esta medida, especialmente en un contexto donde el consumo de alcohol está estrechamente ligado a este tipo de tragedias. A esto se suma el flagelo del alcoholismo, que ya pesa como un drama en muchas familias chihuahuenses y que podría agudizarse con incentivos indirectos como este.

La medida genera una tensión evidente entre los intereses económicos y el bienestar social. Mientras se privilegia la reactivación de un sector económico específico, se corre el riesgo de exacerbar problemas como el abuso del alcohol y sus consecuencias colaterales. 

Caballero y su equipo tendrán que asumir el reto de equilibrar los beneficios económicos con la implementación de medidas que minimicen los riesgos sociales, como reforzar operativos viales, campañas de consumo responsable y un seguimiento puntual del impacto de esta decisión en los índices de seguridad y salud pública.