Mensaje de Año Nuevo 2025 | Por Monseñor Martín Dávila Gándara
A todos los católicos, feligreses y lectores, y a todo los hombre de buena voluntad, les saludo al comienzo de este nuevo año. Deseo de todo corazón una bendición de Dios para ustedes y para toda sus familias
Por: Redacción 01 Enero 2025 12:41
Les felicito a todos por el año nuevo que comenzamos, que sea una oportunidad especial para renovarnos, elaborando proyectos que nos ayuden a alcanzar las más altas aspiraciones y que respondan al hombre de hoy que habita un mundo necesitado de paz, de luz, de conversión, y de hacer realidad los dones y gracias al servicio de Dios y del prójimo.
Un nuevo año que nos abre el horizonte ampliamente para cumplir todos nuestros anhelos, y que significa una oportunidad para hacer mejor lo que hicimos en el año que ha terminado y realizar mejores proyectos.
Además del año nuevo celebramos en este día la Circuncisión del Señor y también el sagrado nombre de Jesús que le pusieron al Redentor en esta ceremonia.
Es importante considerar que este nombre no fue inventado por los hombres, sino bajado del cielo por ministerio de un ángel. Este nombre de Jesús es nombre divino, que sólo Dios pudo imponer al Salvador del mundo.
¡AÑO NUEVO! ¿Qué nos enseña?
Dos cosa nos enseña el año que acaba de empezar: Primero, lo vano e ilusorio de la vida, y segundo, lo breve y fugaz de nuestra existencia.
1.- Efectivamente: ya no existe aquel año al que hace apenas doce meses saludábamos sonriendo con el dictado de año nuevo. Ahora es otro año nuevo, condenado como todos a dejar de serlo también dentro de breve plazo para ceder su puesto a otro de tan fugaz existencia como él.
Hace más de sesenta siglos que viene sucediendo lo mismo, año por año; y decimos: ¡Cómo pasan los años! He aquí la gran ilusión de nuestra vida, tan llena de ellas.
Pero lo cierto y verdadero es que No pasan los años. Quienes pasamos, y muy de prisa, somos los hombres. Sucede con esto como con el ferrocarril. En su carrera ve pasar delante de sí montes y valles, casas y personas, mientras él permanece quieto.
De creer a lo que los ojos ven, diríase que son los objetos los que pasan delante de nosotros; y no son ellos los que pasan, sino nosotros los que pasamos delante de ellos, arrastrados por el tren, que a través de túneles y valles nos lleva al término del viaje.
No pasan, pues, los días, ni vuela el tiempo, ni hay año nuevo ni viejo. Lo que en realidad hay es una porción de viajeros que se forjan la ilusión eterna de ver desfilar todo ante sus ojos, cuando son ellos y sus vidas las que en tropel ruedan por la rápida pendiente de la existencia, cuyo término final es la muerte. Término de viaje que, por añadidura, no sabemos si esta cerca o lejos.
2.- Lo que si sabemos es que la vida, por muy larga que sea, pasa con una rapidez vertiginosa.
Parece que fue ayer cuando celebramos la entrada del año que acaba de pasar, parece; pero en realidad ha pasado un año, y así pasarán los demás.
¡Cómo se nos va de entre las manos el tiempo! Cincuenta, sesenta años, luego que pasaron parecen un momento.
Así es. La vida, nos dice la Escritura, es como sombra que huye, como flor que apenas nacida se marchita.
De los miles de millones de hombres que comenzaron, como nosotros, el año que acaba de pasar, más de cincuenta millones se han quedado en el camino, sin llegar al fin de él.
Ya están en sus sepulcros, siendo comida de gusanos. Todo lo de acá acabó ya para ellos, apenas hay ya quien los recuerde ¡Esto es la vida! Vana, breve, fugaz.
¿Qué hacer? Comprar con ella lo que no se muere, lo que no pasa. Dios, el cielo, la eternidad feliz. Así nos lo aconseja S. Pablo: “Mientras tenemos tiempo, obremos el bien”. Sea nuestra última resolución: Año nuevo, vida nueva.
Por último. Que María, Madre de Dios, nos lleve a Jesús y nos siga acompañando y alentando, para que la luz del Evangelio siga arraigando profundamente en nuestros corazones.
¡Feliz Año 2011! Con Cariño les hago llegar mi bendición.
Sinceramente en Cristo
Mons. Martín Dávila Gándara
Obispo en Misiones
Sus comentarios a obmdavila@yahoo.com.mx