Incluyen Justicia Energética a CFE y PEMEX

González Escobar explicó que estas reformas establecen a Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE) como empresas públicas, dejando atrás su condición de empresas productivas del Estado. 

Este cambio permite que ambas entidades se rijan bajo un marco de operación eficiente, transparente y con austeridad republicana, pero sin ser tratadas como empresas privadas dentro del mercado. Además, se garantiza que sus actividades no sean consideradas monopólicas, sino estratégicas para el bienestar de la población y el desarrollo nacional.

El paquete legislativo abarca modificaciones y nuevas disposiciones para la planeación y regulación del sector energético, estableciendo mecanismos más sólidos y vinculantes para la transición energética. Se refuerza la planeación estatal con nuevos instrumentos de mediano y largo plazo, asegurando que la energía se conciba como un derecho y no solo como una mercancía. También se reconoce la relevancia de los hidrocarburos en la transición energética y se establecen medidas para garantizar la seguridad y confiabilidad en el suministro eléctrico y de gas natural.

Un aspecto fundamental de esta reforma es la introducción del concepto de justicia energética, que busca reducir las desigualdades en el acceso a la energía y priorizar a la población más vulnerable.

Asimismo, se reorganiza la estructura de Pemex y CFE, eliminando sus múltiples subsidiarias y filiales para fortalecer su integración horizontal y vertical, lo que permitirá una mayor eficiencia operativa. La estricta separación legal impuesta en la reforma de 2013 se revierte, lo que facilitará la toma de decisiones y optimizará el manejo presupuestal y financiero de ambas empresas.