Desalojo en Sanatorio Trinidad previo a inspección de Cofepris

Según versiones, se ordenó el traslado de los enfermos a otros hospitales ante la inminente clausura del sanatorio, que ya había sido suspendido y con los quirófanos clausurados, pero seguía realizando procedimientos quirúrgicos de forma irregular.

Testigos informaron que las autoridades de Cofepris habrían advertido a los administradores del hospital sobre la clausura y les indicaron que debían desalojar a los pacientes para “simular” que el hospital estaba cerrado. La administradora del Sanatorio Trinidad, Adriana Beltrán Mallén, explicó a los empleados que el hospital debía aparentar estar inactivo para la inspección de Cofepris.

Sin embargo, horas después, el hospital permaneció abierto, aunque con servicios limitados y sin pacientes, solo ofreciendo hemodiálisis. Este hecho hizo sospechar que el cierre temporal era una estrategia para evitar sanciones durante la visita de los inspectores.

Testimonios como el de Laura Pancardo, quien se opuso al traslado de su familiar en estado crítico, evidencian la angustia de las familias ante la falta de respuestas claras. "Mi paciente no se mueve, está en terapia intensiva desde el 23 de diciembre, no lo voy a desalojar", afirmó.