La vez que intentaron domesticar al zorro… esto pasó

Fue en la URSS donde empezó este trabajo, pese a que en 1948 proscribió Stalin la investigación genética, aunque lo hicieron los científicos a escondidas so pretexto de la mejora en el negocio de cría de pieles.

Primero investigaron el temperamento de cien zorros plateados de Siberia por año, y anualmente criaban a una docena de ellos, elegidos como los más tranquilos.

Dmitry Belyayev era genetista y empezó este trabajo donde notó cómo eran un poco más “aceptables” los zorros reproducidos.

“La descendencia que exhibe las respuestas agresivas y el miedo fue eliminada de la población experimental en tan sólo dos o tres generaciones de selección”, comentó del ejercicio Lyudmila Trut, especialista y escritora del libro “Cómo domar a un zorro”.

A los zorros amistosos los escogía el ruso y los salvaba de un terrible futuro mortal que los convertiría en abrigos.

Era un 10% el que podía salvar aquel ruso de cada generación nueva, según Trut.

Dmitry Belyaev murió en 1985 y el experimento lo siguió Trut, quien destacó como perdía cada generación los altos niveles de serotonina, hormona causante de la conducta agresiva de los zorros.

Ahora Trut continúa y trata de llevar a la realidad el sueño del ruso Belyayev para domesticar al zorro, algo que aún hoy continúa, aunque esa labor no concluye.

Los zorros pueden menear sus colas pero la investigadora Trut señala que aún no siguen órdenes como los perros.

Ejemplo de uno de los zorros domésticos de Trut